En este post quiero hablarte de la meditación Anapanasati. Cada vez que inspiramos o espiramos, intercambiamos algo más que oxígeno y dióxido de carbono. La respiración es el ritmo de la vida, una especie de danza en la que participa todo el cosmos.
La respiración conecta la materia de nuestro cuerpo con la conciencia universal. Pudiera decirse que, de cierta forma, a través de ella comprendemos que espíritu y materia no son cosas separadas.
En artículos anteriores hemos visto otros tipos de meditación guiada, y es muy probable que al menos hayas intentado practicar uno. Está bien si quieres intentar cada uno. A fin de cuentas, es tu búsqueda. Y las búsquedas no son prisiones en las que atrincherarnos.
Experimentar todo cuanto la vida tiene para ofrecer, es la clave para comprender mejor nuestra existencia.
¿Qué es Anapanasati?
Ānāpānā, tomado del pali, se refiere a la actividad natural de inspirar y espirar. Y sati, que se traduce como atención plena o mindfulness. O sea que estamos hablando de la atención en la respiración.
El punto fundamental a tener en cuenta en esta práctica, es que se trata de una observación. No hay que forzar la manera en que naturalmente respiras, sólo volverte consciente de ella.
Hay varios tipos de respiración. Puede ser entrecortada, larga, de inspiraciones profundas y espiraciones cortas, de inspiraciones cortas y espiraciones profundas… y todas las combinaciones intermedias.
Como probablemente sepas, la manera en que respiras dice mucho de la condición en la que se encuentra tu mente. La agitación, el estrés, la calma, cada uno de estos estados se relaciona con la manera en que respiras.
La técnica de meditación Anapanasati
Esta técnica de meditación guiada es conocida por los budistas como la meditación en la respiración. Se trata de observar la manera en que la propia respiración se desarrolla. Sin juicios ni propósitos, la simple atención hace que comprendas cada vez con mayor facilidad el funcionamiento de tu cuerpo.
Así, y en la reiteración, los impulsos y las emociones que te agitaban van cediendo. Es como cuando el fango del río revuelto se asienta en el fondo. Solo entonces eres capaz de ver el agua clara, y las piedras bajo ella.
De la misma manera, la respiración se regula naturalmente, y te permite comprender el origen de sentimientos profundos como la ira, el enojo, el placer, y hasta la alegría exaltada. Esta es la conciencia del momento presente.
La rama Theravada del budismo analiza y estudia el Ānāpānasati Sutta a través de instrucciones muy precisas con el objetivo de aquietar la mente. Cada paso está dirigido al despertar pleno o Nirvana.
En cualquier caso, para practicar la meditación Anapanasati, necesitas un lugar aislado, o al menos silencioso. Si estás en tu casa, mejor una habitación con poco ruido, buena ventilación e iluminación.
Siéntate cómodamente, y si puedes hazlo en loto o medio loto. Concentra tu atención en la respiración. Siente el aire que entra, que sale, sin tratar de cambiar el ritmo o la duración de la frecuencia con que lo hace.
Puedes también notar la temperatura, las sensaciones al pasar por la nariz, todo lo que involucre este acto. Es fundamental que no desvíes la atención a los pensamientos, ni a ninguna otra figura. Simplemente, observa tu respiración.
Tensión o relajación
Este es un detalle vital dentro de la meditación Anapanasati. Es preciso que logres el equilibrio justo entre tensión y relajación.
Si estás demasiado tenso, la respiración será entrecortada y difícil, incluso dolorosa. Esto se traduce en músculos muy contraídos, una postura rígida, y una necesidad imperiosa de moverte y abandonar.
Si, por el contrario, estás demasiado relajado, entrarás en una especie de sopor o somnolencia que también dificulta la práctica. Es preciso mantener una postura erguida, pero nunca con los músculos innecesariamente tensos.
La impermanencia
Con la conciencia de la respiración aparece también la conciencia de la impermenancia. El cambio es la ley que rige este mundo. No hay nada que dure para siempre, ya sea dolor o placer.
Con esto en mente, no te rindas. Recuerda que cada sensación es pasajera.
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Beneficios de la atención plena en la respiración
Como la mayoría de las prácticas meditativas, Anapanasati influye positivamente en tu salud física y mental. Es recomendada para combatir el estrés, la ansiedad, y el insomnio.
La conciencia de la propia respiración puede ayudarte en el caso de que sufras ataques de pánico. Si tu respiración comienza a ser entrecortada, jadeas, o sientes que apenas puedes respirar, todos son síntomas de que estás en distrés.
Aprender a identificar el estado de tu mente observando la respiración puede convertirse en una herramienta muy útil para la vida cotidiana. Piensa que esta actividad nos acompaña desde el nacimiento hasta el último segundo que pasamos en la tierra.
Desde enfrentar una entrevista de trabajo, hasta reaccionar en calma si necesitas tomar decisiones de vida o muerte, o de gran impacto financiero. Si logras mantener el estado de calma, puedes ayudar a que la atmósfera en que se desarrolla cada día sea menos estresante y tensa.
Por otra parte, la concentración en la respiración es también un vehículo para conocer y adiestrar tu mente. Cuando te hagas íntimo con tu respiración, habrás empezado a recorrer el camino que te libera de las pasiones, el miedo, y el sufrimiento.
El Anapanasati Sutta
El Ānāpānasati Sutta o Discurso sobre la Atención Plena en la Respiración, es un texto budista que se atribuye a Shakyamuni Buddha. En él, aparecen instrucciones específicas para que los monjes practiquen el desapego y realicen la vía de la iluminación mediante la concentración en el acto de respirar.
Se trata de un texto fundamental dentro del llamado Canon Pali, y contiene una enseñanza vital trasmitida por el iluminado a sus discípulos.
Los pranayamas
Existen otras técnicas o ejercicios respiratorios como es el caso de los pranayamas de la tradición yoga. En este caso no se trata de la simple observación, si no de implementar un ritmo específico para controlar la respiración.
Dentro de esta variante de la meditación, hay varias formas de práctica. Cada una de ellas lleva instrucciones muy detalladas sobre la inhalación, la postura, la exhalación, y la duración de cada etapa.
A pesar de ser muy usada y beneficiosa, tiene requerimientos especiales relacionados con padecimientos previos.
Conclusiones
Ahora ya conoces una nueva técnica de meditación guiada. Es tan sencilla que puede resultar difícil mantenerla.
Te recomiendo practicarla al menos media hora cada día. Eventualmente, la meditación Anapanasati será algo natural en tu vida cotidiana. Observar el estado de la mente a través de la respiración será un arma increíble en este proceso evolutivo que has empezado.
Recibe un gran abrazo lleno de Amor, Paz y Felicidad para ti.
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